Ya hemos visto como el otoño requiere un tipo de decoración que no se da en otra época del año. Nos olvidamos de los visillos y de las telas finas, para sustituirlas por mantitas, cojines y terciopelo. Una de las claves para transformar tu hogar por completo es atreverte a decorar con alfombras.

Una alfombra es un elemento básico en cualquier casa. No solo son capaces de vestir los suelos, también transmite una sensación de calidez. Un sentimiento que deseamos en cada vez que llegamos a nuestro hogar de la dura jornada laboral. Para que conozcas las características y consejos sobre alfombrar, en Europa 20 te damos los mejores.

Cómo decorar con alfombras en el hogar

Sensaciones: entre los factores para escoger una alfombra se encuentra la motivación estética. Es decir, tiene que gustarte y cuadrar perfectamente con el resto de la decoración; pero también hay que saber las sensaciones positivas que puede otorgarte. Una alfombra debe ser acogedora, apostar calidez y además sea cómoda.

Color: obviamente el color es uno de los factores fundamentales de una alfombra. El momento de escoger tu tonalidad tendremos que armonizarla con la decoración del resto de la estancia. Apuesta por tonos claros en espacios más pequeños que son capaces de ensanchar y dar más luminosidad. El color afecta a nuestro estado de ánimo, así que déjate guiar por la decoración Zen sin tonos muy oscuros.

Ambientes: aunque decorar con alfombras tiene mucho sentido, además se convierten en algo clave para diferentes ambientes. Es una solución inteligente para separar espacios dentro de una misma estancia. Se emplea mucho entre el salón y el comedor, para diferenciar correctamente cada lugar. Con ello ganaras un toque especial y mayor calidez.

Limpieza: una connotación negativa que se suele asociar a las alfombras es la limpieza. Posiblemente una razón de peso para que muchos se olviden de este elemento en su hogar. Por ello, tienes que elegir alfombras que sean fáciles de limpiar. Entre todas escoge aquellas que tengan estampados o dibujos ya que disimularán las manchas y aguantan más la suciedad.

Tamaño: obviamente el tamaño aquí sí importa. No debes sobrecargar una estancia con una alfombra muy grande o quedarte corta con una muy pequeña. Ello dependerá del tamaño del cuarto y la importancia que quieras darle a este elemento. Por lo general, debe ser suficientemente grande para que todos los elementos queden dentro de ella.